Cuando Carlos y Cristina nos anunciaron su enlace, teníamos claro que uno de los regalos que no podrían faltar en su boda era el de unas eleneta’s. Los novios tenían que lucir sus zapatillas totalmente personalizadas ese día.
Intentamos personalizar al máximo, trabajando el diseño con dos elementos primordiales: su gran aficción por el ciclismo, y los retratos de sus dos perrihijos.
De una fotografía donde salían los dos perros, hicimos el dibujo a mano para después plasmarlo sobre la zapatilla y ponernos a pintarlas. Consiguiendo unas zapatillas pintadas a mano animalistas y ecologistas, como los dos recien casados.